Luego de realizar un recorrido en las inmediaciones de las líneas 1 y 2 del Cablebús en la Ciudad de México, (recién inauguradas) se aprecia que entre ambos sistemas de transporte, el que mejor conectado está con otros sistemas públicos de movilidad es Línea 1, que va de Indios Verdes a Cuautepec.
Quienes viajan en Cablebús de la parte alta de la ciudad (alcaldía Gustavo A. Madero) podrán tener conexión -al llegar al Cetram Indios Verdes- con el sistema Metro, Metrobús, Tren Suburbano, autobuses, microbuses y vagonetas provenientes de la CDMX y Estado de México, donde confluyen todos.
En contraste, la Línea 2 del Cablebús que va de Santa Marta a Constitución de 1917, otorga a los usuarios la posibilidad de conectarse con el Metro, líneas 8 y A, además de opciones de autobuses urbanos.
En el recorrido por estas líneas, se apreció que ambas tienen en común el mismo sistema alimentador, se nutren del servicio de transporte público convencional como taxis, autobuses y microbuses, los cuales tienen que ser utilizados para llegar a alguna de las estaciones que conforman el sistema Cablebús.
Ante ello especialistas en materia de movilidad coinciden en que, para que un sistema de transporte masivo cumpla completamente su función de satisfacción, debe plantearse incluso antes de su inauguración, la manera en cómo serán alimentados estos sistemas de transporte, es decir, la forma en que los usuarios van a poder llegar.
De acuerdo con los especialistas en el tema, al contar con sistemas alimentadores de transporte, los medios masivos o semi masivos como el Metrobús, Metro y Cablebús, respectivamente, serán aún más funcionales cumpliendo así con el rol que tienen como medios de movilidad: la satisfacción y calidad del servicio.
Víctor Alvarado, experto en temas de movilidad, opina que, no solo basta con planear la ruta principal o la ruta troncal, sino que también es necesario prever cómo es que se va a alimentar, es decir, qué modificaciones o qué mecanismos vas a desarrollar para garantizar la alimentación de este servicio.
No debemos olvidar, dijo, cómo los grandes sistemas de transporte van a garantizar proximidad al destino final de cada usuario, es ahí donde se propone el desarrollo de rutas alimentadoras. El especialista comentó en entrevista para Pasajero7 que, desde el Poder del Consumidor, -instancia a la que representa en materia de movilidad-, han señalado que la alimentación de los grandes sistemas de transporte “es el gran pendiente”.
Es decir cuando arrancaron estos sistemas (ejemplo Cablebús) también a la par tuvieron que haber arrancado los sistemas alimentadores; lo que vemos ahora es que se siguen operando las rutas tradicionales que circulaban antes de que entrara en operación el Cablebús. De repente en el primer mes si hay una situación de las personas de quererse subir pero al descubrir que no los deja cerca de su destino, que solo es un medio de proximidad, regresan a las rutas anteriores, eso le resta demanda a los sistemas de transporte y te quedas con una mala imagen; eso ya es una cuestión de que la problemática de movilidad está teniendo fallas desde la parte de la demanda, es decir, no estás logrando que el usuario quede totalmente satisfecho con el servicio y con la oferta que estás implementando”.
Víctor Alvarado expresó que se trata de crear rutas alimentadoras sistematizadas que den la mayor proximidad a las personas para llegar a sus destinos finales, ya sea para arribar a las estaciones del Cablebús o bien al trabajo o escuela.
El Organismo Regulador del Transporte tiene la facultad y obligación de la planeación, además de los sistemas de corredores estructurados, tiene la función de habilitar lo referente a los sistemas alimentadores, (ellos) son quienes tienen la responsabilidad de gestionar, planear y generar propuestas que en conjunto con la Secretaría de Movilidad se tienen que validar.
El especialista lamentó que hay sistemas de transporte que ya tienen tiempo operando, pero no hay celeridad en la conformación de rutas de transporte que sean integrales y bien estructuradas para la Ciudad de México.
En el caso particular del Cablebús, Alvarado considera que quizá se tiene una visualización de que “lo es todo” o se puede mover “por sí solo”, pero no es así, reconoció, se trata de la columna vertebral que necesita ramificaciones para que el sistema opere eficazmente. “A la fecha no tenemos ningún corredor consolidado de manera significativa”.
No todo es malo
Aunque considera que hay un atraso, el representante del organismo El Poder del Consumidor dijo que es un tema en el cual ya se está trabajando, incluso recordó que a estas rutas alimentadoras se les ha nombrado “rutas zonales”. Al menos para Cablebús L1 ya se tendría que contar con el sistema alimentador una vez que todos los estudiantes regresen a las clases presenciales y así tendrá que ser cada que se inaugura una nueva obra de movilidad del tamaño de los sistemas BRT, Cablebús, Trolebús, Metro, etc.
Para el caso de la primera línea de Cablebús, información oficial del gobierno de la Ciudad de México proyecta una demanda de 48 mil personas por día. En contraste para la segunda ruta inaugurada el pasado mes de agosto, el secretario de movilidad de la capital del país, Andrés Lajous, estimó una demanda de 30 mil usuarios por día, aunque en un principio se habían proyectado 27 mil, esto de acuerdo con Lajous, representa que hay un incremento en la demanda de los usuarios.
La movilidad no motorizada un gran aliado
Un sistema alimentador no únicamente tiene que ser motorizado, al hablar del término micromovilidad, los especialistas consideran a aquella que no es motorizada, sin embargo, sirve para que las personas se puedan desplazar hacia otros modos de transporte.
Para citar un ejemplo, Maytonce García, especialista en temas de seguridad vial y movilidad, en entrevista con Pasajero7 refirió como ejemplo de este tipo de movilidad, a la bicicleta, los ciclotaxis, bicitaxis y mototaxis que han tomado popularidad principalmente en la zona centro de la Ciudad de México, sin embargo, al no estar completamente regulados a excepción de la bicicleta, aún no es posible que sus ramificaciones tengan presencia en otras partes de la ciudad, principalmente las alcaldías más alejadas, (caso L1 y L2 del Cablebús) de la zona centro de la ciudad.
En general seguimos viendo microbuses, taxis piratas, etc, entonces hay que entrarle a la micromovilidad, no es masivo, pero puede ir a la par de sistemas como Ecobici; definitivamente los ciclotaxis (y similares) son un sistema que tendría que modernizarse, la columna vertebral de la micromovilidad pueden ser los ciclotaxis, claro con características de accesibilidad, seguridad y eficiencia” señaló Maytonce García.