La seguridad en carreteras es clave para dar un buen servicio en el transporte de pasajeros - Pasajero7

La seguridad en carreteras es clave para dar un buen servicio en el transporte de pasajeros

SEGURIDAD EN CARRETERAS

La seguridad en carreteras y autopistas en México es un tema urgente que afecta directamente la calidad del servicio de transporte de pasajeros, la integridad de los usuarios y la confianza en los operadores. Los índices delictivos, como robos y asaltos, además del transporte ilegal de mercancías o personas, exigen una respuesta decidida por parte de las autoridades y una colaboración activa de los concesionarios. En este sentido, la presencia policial, los controles de seguridad y la reducción de puntos inseguros son pilares fundamentales para abordar este problema y garantizar la tranquilidad en los desplazamientos.

Uno de los mayores retos en las carreteras mexicanas es la falta de vigilancia constante. Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, los incidentes delictivos en autopistas y carreteras han mostrado un incremento en estados clave como Puebla, Veracruz y el Estado de México, que son nodos importantes para el transporte de pasajeros y mercancías.

“La presencia policial visible y activa en las carreteras no solo disuade a los delincuentes, sino también crea una percepción de seguridad en los usuarios. Es importante que esta vigilancia sea permanente y no únicamente en temporadas de alta afluencia”, asegura Raúl Ortiz, experto en criminología y profesor de la Universidad Autónoma de Querétaro.

La implementación de operativos regulares, como retenes y revisiones aleatorias, no solo desincentiva la actividad delictiva, sino que también permite detectar prácticas ilegales como el transporte de mercancías ilícitas o el tráfico de personas. Esto requiere una colaboración efectiva entre la Guardia Nacional, la Policía Federal y las autoridades estatales y municipales.

“Los operativos deben estar respaldados por tecnología avanzada, como cámaras con reconocimiento facial y drones, para garantizar su eficacia y ampliar la capacidad de vigilancia en puntos críticos”, añade Laura Hernández, especialista en movilidad y seguridad vial del Instituto Mexicano del Transporte (IMT).

Reducción de puntos inseguros

Otro aspecto crítico para mejorar la seguridad en el transporte de pasajeros es la identificación y reforzamiento de los puntos más inseguros en las carreteras. Estas áreas, conocidas comúnmente como “focos rojos”, concentran una alta incidencia de delitos y accidentes debido a factores como iluminación insuficiente, falta de señalización o abandono por parte de las autoridades.

Un estudio reciente del IMT reveló que al menos el 35% de los delitos en carreteras ocurre en tramos con baja visibilidad o en zonas de descanso sin infraestructura adecuada. “La falta de infraestructura es un facilitador del delito. Los paraderos sin vigilancia, los tramos carreteros sin alumbrado y la ausencia de cámaras de monitoreo son un caldo de cultivo para los actos delictivos”, señala Sofía Vargas, investigadora en políticas de seguridad pública de la Universidad Iberoamericana.

Proyectos como el implementado en Guanajuato, donde se crearon estaciones de descanso con vigilancia las 24 horas, han demostrado ser efectivos. En este estado, los incidentes delictivos en tramos carreteros disminuyeron un 28% en el primer año de operación, según reportes del gobierno estatal.

“La tecnología también es clave para reducir los puntos inseguros. Drones y sensores instalados en las autopistas permiten monitorear áreas de difícil acceso en tiempo real, lo que facilita una respuesta inmediata en caso de emergencia”, comenta Patricia Ramírez, directora de operaciones de una empresa de transporte público en Querétaro.

Impacto en el transporte de pasajeros

La inseguridad en las carreteras afecta de manera directa la calidad del servicio de transporte de pasajeros. Los usuarios optan por medios de transporte alternativos o cancelan viajes debido al miedo, lo que genera pérdidas económicas significativas para las empresas transportistas.

“Cuando los pasajeros perciben que no hay garantías de seguridad en su trayecto, prefieren no viajar. Esto afecta la confianza en el sector y compromete su crecimiento”, afirma Juan López, representante de la Cámara Nacional de Autotransporte de Pasaje y Turismo (CANAPAT).

Los operadores de transporte, por su parte, enfrentan riesgos que afectan su desempeño. El estrés causado por posibles ataques o robos puede llevar a errores en la conducción, incrementando la probabilidad de accidentes. “Es fundamental garantizar la seguridad en las carreteras no solo por los pasajeros, sino también por los conductores, quienes son una parte esencial del sistema de movilidad”, destaca Carlos Martínez, director de seguridad en transporte de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM).

Garantizar la seguridad en carreteras y autopistas no solo es un derecho de los pasajeros, sino también una condición indispensable para el desarrollo económico y social del país. 

Recomendaciones para un cambio efectivo

Para que las medidas mencionadas sean efectivas, es necesario adoptar un enfoque integral que involucre a todos los actores del sector. Algunas recomendaciones incluyen:

  • Fortalecer la coordinación interinstitucional: Las autoridades locales, estatales y federales deben trabajar de manera conjunta para implementar estrategias que respondan a las necesidades específicas de cada región.
  • Inversiones en infraestructura: Es urgente destinar recursos a la modernización de carreteras, con un enfoque en la seguridad de los usuarios y operadores.
  • Capacitación y sensibilización: Tanto los operadores como las fuerzas de seguridad deben recibir capacitación para identificar riesgos y actuar de manera efectiva en situaciones de emergencia.
  • Fomentar la denuncia ciudadana: Los pasajeros y transportistas deben ser incentivados a reportar incidentes, lo que permitirá identificar con mayor precisión los focos rojos y diseñar estrategias específicas para su atención.

Con medidas como la presencia policial, la reducción de puntos inseguros y el uso de tecnología en carreteras y autopistas, México puede avanzar hacia un sistema de transporte más seguro y eficiente.