Activistas de diversas organizaciones sociales presentaron una propuesta de Ley de Movilidad y Seguridad Vial para el estado, la cual busca sustituir la actual Ley de Tránsito y armonizarla con la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial. Entre sus propuestas más destacadas está la implementación de transporte público gratuito en localidades rurales, así como medidas claras para reducir las muertes por siniestros viales.
La propuesta establece una jerarquía de movilidad enfocada en garantizar la seguridad y accesibilidad para los sectores más vulnerables. Según el documento, la prioridad sería para peatones, ciclistas, usuarios de vehículos no motorizados, seguidos de vehículos eléctricos con límites de velocidad de hasta 50 km/h, transporte público, transporte de bienes y, finalmente, automóviles particulares.
Esta reestructuración busca fomentar una movilidad más equitativa y sostenible, un desafío importante para un estado como Querétaro, donde el crecimiento urbano ha superado la planeación vial.
Límites de velocidad específicos para reducir siniestros
La ley propone una serie de límites de velocidad adaptados a las características de cada zona:
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20 km/h en áreas cercanas a hospitales, asilos, albergues, casas hogar y entornos escolares en vías secundarias y terciarias.
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30 km/h en entornos escolares de vías primarias y carreteras.
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50 km/h en avenidas primarias sin acceso controlado.
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80 km/h en carriles centrales de avenidas con acceso controlado y carreteras estatales fuera de zonas urbanas.
Además, se establece un límite máximo de 50 km/h en zonas urbanas, independientemente del tipo de vía, para todas las intersecciones.
Transporte gratuito para estudiantes: un paso hacia la equidad
Una de las iniciativas más significativas es el transporte público gratuito para niñas, niños y adolescentes, diseñado para evitar que estudiantes de primaria caminen más de 30 minutos (o un kilómetro) hacia sus escuelas. Para estudiantes de secundaria y nivel medio superior, el tiempo máximo de traslado a pie sería de 60 minutos (o tres kilómetros).
Esta medida busca eliminar barreras económicas y de acceso a la educación, especialmente en zonas rurales, donde el transporte público escasea y la distancia a las escuelas puede ser un factor determinante para la deserción escolar.
Una ley urgente para salvar vidas
Juan Carlos Bravo Valle, vocero de la Coalición Ciudadana por la Movilidad Sostenible de Querétaro (QM21), enfatizó que los siniestros viales son la principal causa de muerte entre niños y jóvenes en el país. En Querétaro, las muertes por accidentes de tránsito superan incluso las cifras de homicidios, lo que evidencia la urgencia de actuar.
“A nivel internacional, los siniestros viales se consideran una pandemia según la
Organización Mundial de la Salud, porque están dañando profundamente a nuestras sociedades”, señaló Bravo Valle.
Por su parte, Waltter López González, otro de los activistas que impulsa la ley, destacó que reducir las velocidades en puntos clave es una medida comprobada para disminuir significativamente las muertes viales. “Pacificar y humanizar nuestras ciudades debe ser una prioridad, sobre todo en un estado que crece a un ritmo tan acelerado como Querétaro”, afirmó.
Críticas al retraso en la armonización legislativa
Arturo Maximiliano García Pérez, diputado local, subrayó que la armonización de la ley estatal con la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial tiene un retraso de más de cinco meses, incumpliendo el plazo establecido por la reforma federal.
“El hecho de que estas muertes sean prevenibles debería ser suficiente para priorizar esta legislación. Es un tema de proteger vidas y garantizar que nuestras ciudades sean seguras para todos”, concluyó García Pérez.
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Una llamada a la acción
La propuesta de ley llega en un momento crítico para Querétaro, donde el rápido crecimiento urbano y la falta de infraestructura adecuada han puesto en riesgo la seguridad de peatones y conductores. Sin embargo, su implementación dependerá de la voluntad política para priorizar a las personas sobre los automóviles y transformar las ciudades en espacios más humanos y sostenibles.