En la actualidad es fundamental para cualquier estado del país, que la integración del transporte no se limite solo a las ciudades, sino que incluya al transporte que viene de las áreas suburbanas, y la inclusión de otros modos de transporte que permitan ofrecer el servicio que responda a la demanda de la población.
Para lograrlo se requiere de la voluntad e integración institucional, de una nueva gestión metropolitana de las diferentes dependencias responsables, de una madurez política que adecue los sistemas de transporte de las ciudades a la realidad de la movilidad de las personas, pues no hay ciudadanos de primera o de segunda, sino que somos personas que requerimos movilizarnos dentro de un entorno común.
Es necesario reducir los costos de la descoordinación y la división en fronteras que no aportan nada a este tipo de servicios. En la medida en que la gestión metropolitana de la movilidad se enfoque solamente en la problemática y las necesidades específicas del sector, es que se pueden reducir estas barreras.
Dentro de estas acciones hay dos prioritarias para la AMTM: La creación de organismos de transporte metropolitanos que tomen decisiones sobre operación, servicio y planeación de los organismos operadores de transporte, es decir, los modelos de transporte y movilidad en la definición de los proyectos a implementar en las ciudades considerando a los transportistas.
Y una política económica nacional y su implicación en el desarrollo y crecimiento del transporte, así como los principales programas y proyectos en movilidad, que contemple el fortalecimiento de organismos en el que estén representados municipios y estados en cada zona metropolitana, y que tengan capacidad de decisión respecto a gasto de inversión, destino de fondos y planeación.
Hasta hoy los transportistas no hemos podido unificar en un esfuerzo común, por ejemplo, una política tarifaria a nivel nacional. El sector transporte es vital para el desarrollo de las ciudades; los objetivos de la AMTM, han impulsado la profesionalización, organización y eficiencia como principios esenciales de los usuarios, transportistas y sociedad.
Se debe impulsar una Asociación que permita atender un servicio de un interés general para un transporte público de calidad, para el usuario y la ciudadanía con sustentabilidad y desarrollo tecnológico. Es importante que los transportistas conozcan procesos de planeación estratégica, procesos documentados, cultura y clima organizacional, y actitud adecuada con el fin de organizar estructuras regionales, vinculadas con la modernización y el desarrollo tecnológico.
La evolución del transporte, se caracteriza por el juego estratégico, donde en las ciudades el “tablero es el transportista” y las fichas son las autoridades, en muchos casos improvisadas; es necesario que el transportista comience a ser no solo actor, sino también el autor, entonces la integración puede ayudar a mover los hilos de las autoridades.
Para lograr una agenda nacional importante, que considere el transporte multimodal, es importante vencer los temores y comenzar a ofrecer solución al transporte manejado por auténticos transportistas. Cada vez en nuestro país, se suman más estados a este esfuerzo y esta lucha, es impostergable la urgente necesidad de conjuntar esfuerzos para recibir otro trato por parte de autoridades.
En la actualidad el transportista urbano, tiene muy pocos foros para hacer escuchar sus propuestas, ya que hoy por hoy, se viven las consecuencias del interés político y económico que los está desplazando, el gremio enfrenta un limbo jurídico, por no tener refrendo de concesiones y rezagos en la actualización de la tarifa, por mencionar solo algunos.
Son dos los conceptos que más cuestan trabajo para la organización de los transportistas: la unidad y la organización.
No se puede concebir el desarrollo urbano sin tener una visión de modernización en el sistema de transporte; el transportista tiene los impactos severos por el aumento de combustibles, la respuesta está en manos de la organización de los transportistas; se debe concertar una tarifa como parte de una estrategia de mediano plazo, evitando los incrementos aislados en factor de una estrategia, que no afecte al usuario.
Se requiere de la conformación de una cámara, con representación y con la posibilidad de interlocución con autoridades, en este sentido se deben buscar los mecanismos para que uniones, federaciones, confederaciones, sociedades cooperativas y sindicatos estén incluidos en la misma.
Nuestro país está migrando a estos sistemas, a pesar de la carga fiscal impositiva para las empresas; en México se ocupan modelos empresariales para economías de escala, con proveedores, si estamos juntos, podemos lograr mejores precios: diésel, autobuses, etc. No se debe perder de vista que el servicio que ofrecemos se orienta hacia el transporte masivo integrado de calidad en el futuro.