Con la promesa de mejorar la conectividad, accesibilidad, seguridad, sustentabilidad y desarrollo urbano inteligente, el gobierno municipal de Ensenada ha iniciado la elaboración del Plan Integral de Movilidad Urbana Sostenible. Sin embargo, más allá de los discursos oficiales, el éxito de este proyecto dependerá de su implementación real y de su impacto en la movilidad cotidiana de los ciudadanos.
La alcaldesa Claudia Agatón Muñiz informó que este plan busca integrar políticas sociales en materia de movilidad y se desarrolla a través de la Dirección de Bienestar Social, en coordinación con la comunidad, autoridades de distintos niveles de gobierno e instituciones de diversos sectores. No obstante, aún no se han detallado los plazos ni los mecanismos concretos para garantizar su cumplimiento.
Un proyecto con retos por delante
La presidenta municipal enfatizó que la movilidad es un eje fundamental para fomentar el desarrollo económico y mejorar el transporte público, la movilidad activa, la seguridad vial y la inclusión social con perspectiva de género. Para ello, se trabaja con organismos como el Consejo Consultivo Económico (Consulten), el Comité Municipal de Planeación, el Instituto Municipal de Investigación y Planeación, el Instituto Municipal de la Mujer y otras instancias.
A pesar del reconocimiento a la participación de diversos actores en el diseño del plan, un punto crítico es que en Ensenada la movilidad urbana enfrenta problemas estructurales, como la falta de rutas de transporte eficientes, unidades en mal estado y la ausencia de una cultura vial incluyente.
Diagnóstico y propuestas
En las mesas de trabajo, Julio Salinas, presidente de Consulten, explicó que se realizará un diagnóstico detallado con trabajo de campo y consultas directas con la comunidad para conocer las necesidades reales del municipio. Sin embargo, experiencias previas han demostrado que estos diagnósticos muchas veces no se traducen en soluciones tangibles.
Iván Chávez Orozco, representante de Movilidad de la Dirección de Bienestar Social, destacó que el plan busca ser incluyente con sectores en situación de vulnerabilidad. No obstante, es fundamental que esta inclusión no quede solo en el discurso y que se traduzca en mejoras concretas en la infraestructura y el servicio de transporte.
Entre las principales demandas de la comunidad destacan la necesidad de mejorar y ampliar las rutas de transporte público, evitando que todos los trayectos obliguen a los usuarios a pasar por el centro de la ciudad. También se solicitó la capacitación de transportistas, la renovación de unidades, la implementación de mapas de rutas y la ampliación de horarios de servicio, incluyendo rutas nocturnas y hacia las delegaciones municipales.
Además, se hizo hincapié en la urgencia de fomentar una cultura vial con respeto al peatón, un aspecto que a menudo queda relegado en la planificación urbana.
Un plan que requiere acción
El Plan Integral de Movilidad Urbana Sostenible de Ensenada tiene el potencial de transformar la movilidad en el municipio, pero su éxito dependerá de que las autoridades no solo escuchen, sino que también ejecuten soluciones efectivas. La ciudad necesita un sistema de transporte eficiente, seguro e incluyente, y esto solo se logrará si el plan se materializa con acciones concretas y presupuestos suficientes para su ejecución.
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De lo contrario, este esfuerzo podría quedar como un ejercicio de diagnóstico más, sin cambios significativos en la movilidad de los ensenadenses.