ESCRITO POR: Pablo Lazo Elizondo, Director Desarrollo Urbano y Accesibilidad para WRI México
Con el financiamiento de la Iniciativa Climática Internacional (IKI) del Ministerio de Ambiente, Conservación y Seguridad Nuclear (BMU) del Gobierno Federal Alemán impulsan en Naucalpan y León estrategias que contribuyan a la descarbonización y regeneración urbana mediante procesos de gobernanza participativa que involucra a las autoridades locales, organizaciones de la sociedad civil, miembros de la academia y el sector empresarial.
En México como en el resto de América Latina el 80% de la población vive en áreas urbanas y las ciudades, que ya están padeciendo los efectos negativos del cambio climático, especialmente por eventos de calor extremo y estrés hídrico.
Para lograr limitar el aumento de temperatura deberíamos para 2030 reducir a la mitad las emisiones, en este sentido, el reto se concentra en las ciudades, ya que son los grandes contribuyentes al cambio climático, pero también son la oportunidad para la acción. Es necesaria una transformación urbana hacia la descarbonización.
Para 2030 el 60% de la población a nivel mundial vivirá en ciudades, habrá mayores efectos en asentamientos irregulares por expansión urbana sin planeación, sin servicios adecuados. En las ciudades gran parte de la desigualdad, que impacta en la pobreza, proviene de un modelo urbano que limita el acceso de la población a las oportunidades de desarrollo de la ciudad.
Ante ese escenario el llamado es a lograr un modelo de desarrollo resiliente al clima, un modelo de planeación urbana compacto, limitar la expansión urbana, transitar a un modelo 3C+E compacto, conectado, coordinado y equitativo.
GARANTIZAR ACCESIBILIDAD A SATISFACTORES URBANOS, FINANCIAR MOVILIDAD ACTIVA
Con el financiamiento de la Iniciativa Climática Internacional (IKI) del Ministerio de Ambiente, Conservación y Seguridad Nuclear (BMU) del Gobierno Federal Alemán, el proyecto Coaliciones Urbanas Transformadoras, TUC por sus siglas en inglés, busca mitigar el cambio climático, incrementar la resiliencia y reducir las desigualdades en dos ciudades mexicanas: Naucalpan y León.
El proyecto, dividido en dos fases, cada una con duración de tres años y fecha de término en 2026, promueve nuevos modelos de gobernanza, impulso de proyectos estratégicos y el fortalecimiento de capacidades locales para generar iniciativas que permitan mitigar el cambio climático mediante iniciativas orientadas a la descarbonización.
Para avanzar en este objetivo se han conformado en esas dos ciudades Laboratorios Urbanos, que son espacios de intercambio, participación y compromiso de diferentes actores gubernamentales, ciudadanos, académicos, el sector privado y otros actores relevantes que colaboran para desarrollar colectivamente soluciones a desafíos urbanos complejos mediante la búsqueda de consensos, diagnósticos colaborativos y actividades demostrativas.
La Universidad de las Naciones Unidas – Instituto para el Medio Ambiente y la Seguridad Humana (UNU-EHS)-, el Instituto de Recursos Mundiales (WRI), el Instituto Internacional para el Medio Ambiente y el Desarrollo (IIED) y el Instituto Alemán de Desarrollo / Deutsches Institut für Entwicklungspolitik (DIE), integran el consorcio encargado de la implementación del proyecto.
En Latinoamérica TUC trabaja en Brasil y en Argentina. En México el proyecto eligió a los municipios de Naucalpan en el Estado de México y León en Guanajuato, ciudades que ya enfrentan los efectos negativos derivados del cambio climático.
Naucalpan hace parte de la ZMVM, su cercanía con la CDMX y conectividad lo convierten en un subcentro económico metropolitano, cuenta con equipamientos culturales y educativos relevantes, enfrenta retos apremiantes derivados del modelo urbano disperso pero cuenta con instrumentos normativos para hacer frente al cambio climático.
Mediante la firma de un convenio de colaboración, las autoridades de Naucalpan y el WRI-México, formalizaron los términos del trabajo conjunto que se desarrolla en esta localidad del estado de México en el marco del proyecto TUC.
Considerado el tercer municipio más habitado del país, León, Guanajuato es el epicentro económico del bajío mexicano en donde destaca por su potencial de innovación. Enfrenta los efectos de un modelo urbano disperso, así como el riesgo de impactos climáticos, pero cuenta con instrumentos locales para hacerle frente.
El municipio enfrenta el riesgo de impactos climáticos tales como tendencia de calentamiento y temperatura extrema –islas de calor, incendios-, tendencia de desecación, inundaciones, precipitación extrema y ciclones, así como cambios en ciclos estacionales.
En mayo, autoridades estatales y municipales, representantes de organizaciones de la sociedad civil, miembros de la academia y del sector privado local se integraron a los laboratorios urbanos en estas dos ciudades.
Con un enfoque de gobernanza participativa los laboratorios urbanos permitirán el desarrollo de estrategias para abordar desafíos locales en el desarrollo urbano, la desigualdad y la reducción de emisiones de carbono.
En una primera fase se busca que los laboratorios urbanos contribuyan a la toma de acuerdos, la definición de una visión común, y la realización de experimentos que ayuden a probar qué pasaría si se toman acuerdos sobre acciones orientadas a generar transformaciones de sostenibilidad local con un enfoque específico. Los acuerdos, beneficios potenciales y logros tempranos del proyecto TUC serán consignados en próximas colaboraciones conforme avance su implementación en el país.