El Metro, sin lugar a dudas es uno de los sistemas de transporte colectivo más importantes a nivel mundial; en el caso de la Ciudad de México, se ha destacado por ser uno de los más grandes en extensión y por trasladar por día a casi cinco millones de usuarios; asimismo, ciudades como Guadalajara y Monterrey, cuentan también con un sistema de transporte similar aunque de menor capacidad.
GUADALAJARA
En 1989, la ciudad de Guadalajara inauguró su primera línea del que comúnmente es llamado Tren Ligero.
Para el 1994 el Tren Ligero fue ampliado concretándose así la Línea 2. Actualmente el Gobierno del Estado de Jalisco trabaja en lo que será la Línea 3 de este sistema de transporte, el cual conectará los municipios de Guadalajara, Zapopan y Tlaquepaque en un recorrido de 21.5 kilómetros; las autoridades estatales estiman que serán 233 mil usuarios al día los que se verán beneficiados con la obra.
MONTERREY
En 1991, los habitantes de Monterrey se ven beneficiados con el Metrorrey a través de la Línea 1.
Tres años más tarde, en 1994, fue inaugurada la Línea 2 de esta especie de tren ligero eléctrico que en capacidad de traslado de personas es mucho menor que el Metro de la Ciudad de México. Se estima que por día brinda servicio a 500 mil usuarios.
CIUDAD DE MÉXICO
La Ciudad de México es el núcleo urbano más grande del país, así como el principal centro político, económico, financiero, empresarial, académico y cultural. Se dice que las ciudades con mejor economía son las que han desarrollado sistemas alternos de movilidad específicamente como el Metro, sin embargo, hay ciudades mexicanas que aportan buena parte de su economía al PIB y aún no cuentan con un sistema de transporte tan desarrollado como éste. De acuerdo con cifras del INEGI (2014) Jalisco no está en el ranking de los primeros tres lugares de aportación al PIB. En este sentido, la Ciudad de México antes Distrito Federal, tuvo una participación estatal en el Producto Interno Bruto de 16.5% mientras que el Estado de México aportó el 9.3 y Nuevo León 7.3%.
A Jalisco se le situó en el cuarto lugar con una aportación del 6.5%. El último lugar de las entidades fue para Tlaxcala con el 0.6% de aportación a la economía mexicana. De igual forma, el 86% de los ingresos totales que tuvieron los estados en el año 2015 provinieron de transferencias federales, lo cual muestra que la captación propia por estado se encuentra en un nivel por debajo de sus necesidades, lo que les ha impedido, entre otras cosas, destinar un presupuesto específico para la construcción de líneas de Metro, aún cuando el número de habitantes por ciudad ya lo requiera.